ACERCA DE RAMEN OTAKU
En los días embriagadores de 1993, un joven alemán impresionable: 14 años, pelo largo, barba de chivo y con gafas gruesas para leer, acompañado su padre un chef con estrella Michelin, en la tierra del sol naciente, se encontraban en camino para cumplir un contrato de su padre, cocinando en la embajada alemana en Tokio. Y fue así, en medio de sartenes, ollas, cocinas y restaurantes que Bjöern Heibuëlt abrió los ojos al mundo de la cultura japonesa y, lo que es más importante, a su cocina básica: el humilde Ramen.
Conocidos como perfeccionistas en todo lo que hacen, los japoneses asisten a la preparación del Ramen con el respeto de quien ha estudiado y se ha preparado solemnemente. Cada caldo y sopa implican muchas horas de cuidadosa atención al detalle y es por ello que para permitirse dar este respeto, el Ramen y demás preparaciones Japonesas solo se preparan en su propio y exclusivo restaurante de ahí que no encontrarás que Sushi y Yakatori comparten el mismo espacio de cocina, y lo mismo ocurre con el Ramen. ¡Tanto es así que no se puede proclamar que sirven Ramen auténtico si se ofrecen otros platos en el mismo menú! A tal perfección se lleva en la práctica que, en promedio los restaurantes japoneses de ramen ofrecen un solo tipo de ramen, Es asi como una de las muchas mezclas de sabores y texturas de este viaje, y un caldo conmovedor que tanto aman y reune a las clase trabajadoras de Japón y a su élite que a Bjöern le marco la vida en sus papilas gustativas, por lo que el joven alemán quedó enganchado.
Al llegar a casa desde Japón, era obvio para Bjöern la dirección que tomaría su vida, y que el Ramen algún día sería parte de ella. La influencia de su padre fue clara, y la hospitalidad y la restauración como manera de proporcionar comidas, acoger a las personas, estaba en su sangre. La industria era variada y fascinante, y le abriría las puertas del mundo, comenzando un viaje alrededor del mismo para enriquecer su conocimiento cultural, paladar y apetito.
Estudiar gestión hotelera en casa en Bonn fue un primer paso crucial. ¡No se conquista el mundo hablando un solo idioma! Con una sólida comprensión del inglés, Bjöern comenzó a trabajar con la cadena de hoteles y resorts Starwood en Londres - Inglaterra, y construyó los cimientos de sus habilidades para establecer contactos. Fue desde aquí que viajó, primero de forma independiente, luego como parte de la tripulación a bordo de un crucero de lujo visitando docenas de países de todo el mundo y este transatlántico de lujo le dio paso a posiciones a bordo de yates privados exclusivos y un nuevo reino la clientela de alto perfil económico.
Bjöern finalmente siguió a esta compañía de jet set para establecerse a la vanguardia de la industria de servicios en la isla de Ibiza. La mal conocida “Isla de la fiesta” se ha convertido en los últimos años en un semillero de restaurantes de alta calidad, popups y mansiones, y ha ofrecido amplias oportunidades para que alguien del calibre de Bjöern brille. Aquí proporcionó sus servicios superiores a todo tipo de clientes, desde actores de Hollywood y productores de cine, artistas de la escena musical global, hasta miembros de la realeza, farmacéuticos reconocidos, en fin, millonarios y multimillonarios del mundo.
Al regresar temporada tras temporada para sus clientes privados favoritos, faltaba una cosa en Baleres, una cocina dedicada que sirviera auténtico ramen. Siempre estuvo feliz de preparar el plato para amigos, clientes o simplemente para él. Bjöern acostumbraba a viajar a otras ciudades para encontrar y disfrutar del verdadero Ramen en un restaurante de calidad, con regularidad lo hacia a Barcelona. Asi las cosas siguiendo el consejo de su novia (¡sin duda harto de su constante cantaleta!) acerca de la necesidad de abrir su propio restaurante de Ramen se hizo repentinamente obvio el paso a dar por lo que prepararon maletas y partieron a Tokyo para terminar de formarse, profundizando como es debido en la preparación de este plato, instruidos en una escuela de Ramen de la mano de uno de los chef del grupo Rajuko Lab con tiendas recomendadas por la guía Michelin. Y fue asi como tras un año de preparativos llego la hora de presentar a las Islas Baleares el deleite japonés y satisfacer su propio deseo al mismo tiempo.